La primera vez que oí esta palabra me resultó un poco extraña. ¿Cómo podíamos desaprender algo que nos habían enseñado y que, por tanto, habíamos aprendido?
Después de varias explicaciones, no sólo de Almudena (nuestra profesora de didáctica), empecé a pensar sobre ello y comprendí lo que quería decir ese prefijo.
En clase, llegamos a la conclusión de que las cosas no mejoraban con el tiempo, si no que avanzaban acorde con la época y la sociedad adaptándose a la actualidad. Todo esto es provocado por personas que siguen un proceso, el proceso de “desaprendizaje”, es decir, cada cual elije su propia definición de las cosas una vez que ha contrastado las teorías anteriores. Todo esto supone mirar más allá de lo establecido, pensar sin presiones, algo que en todo este tiempo atrás ha sido castigado por un sistema academicista.
Otra conclusión a la que llegamos, o al menos yo, fue que el miedo nos impedía avanzar en el aprendizaje y que por tanto el miedo y la lógica eran conceptos totalmente incompatibles.
Ese mismo día trabajamos otro concepto nuevo; los paradigmas. Según entendí, la didáctica trabajaba a través de ellos y estos eran ejemplos de algunos autores. Además también hablamos de los elementos curriculares (Objetivos, contenidos, metodología, evaluación, recursos, formadores y grupos destinatarios) A partir de ellos empezaríamos a conocer los modelos de diseño curricular.
A continuación, dejo un par de anuncios que me llamaron la atención, ya que personalmente me ayudaron a entender el concepto de la palabra
"desaprender".